El Gobierno de Perú ha reconocido oficialmente a Edmundo González Urrutia como presidente electo de Venezuela, tras los comicios presidenciales del pasado domingo. Este anuncio fue hecho por el canciller peruano, Javier González-Olaechea, quien destacó que esta posición es respaldada por varios países y organismos internacionales.
González-Olaechea criticó duramente al actual mandatario, Nicolás Maduro, calificando las elecciones de fraudulentas y acusándolo de intentar perpetuarse en el poder a través de una dictadura. El canciller informó que envió un mensaje de solidaridad a la líder opositora María Corina Machado y a González Urrutia.
Según el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, Maduro ganó con una ventaja de poco más de 704.114 votos sobre González Urrutia, aunque aún faltaba por contar el 20% de las actas, representando 2.394.268 votos cuyo destino es incierto y podría modificar los resultados finales. La principal coalición opositora, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), afirmó que González Urrutia había ganado con un amplio margen y creó una página web con el 73% de las actas electorales para reforzar su reclamo.
En respuesta al reconocimiento de Perú, el gobierno venezolano exigió la retirada inmediata del personal diplomático de Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay. Además, ha advertido sobre posibles acciones legales y políticas para defender su autodeterminación.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, descalificó la posición de Perú, llamando a su gobierno «no electo» y comparándolo con el «nuevo Guaidó», en referencia al principal candidato opositor. Maduro subrayó su compromiso con la recuperación económica de Venezuela y con el diálogo con todos los sectores de la sociedad.
El conflicto diplomático se ha intensificado con el rechazo de otros líderes latinoamericanos a los resultados de las elecciones, con varios países pidiendo una revisión más exhaustiva de los comicios.