Irán lanzó un masivo ataque con más de 180 misiles balísticos contra Israel, lo que provocó una reacción inmediata en la población israelí. El ataque se inició con el sonido de sirenas en todo Israel, alertando a los ciudadanos en ciudades como Jerusalén, Tel Aviv y Haifa. La gente tuvo que refugiarse en habitaciones de seguridad y refugios, mientras se escuchaban disparos y celebraciones en Gaza.
La Casa Blanca informó que no se han registrado víctimas hasta el momento, aunque se espera una conferencia de prensa del Pentágono para dar más detalles. Se confirmó que el ataque fue un esfuerzo coordinado por parte de la Guardia Revolucionaria iraní, que busca vengar la muerte de líderes proiraníes, como el líder de Hezbolá y un alto general de la Guardia Revolucionaria, en un bombardeo israelí.
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La respuesta israelí
A pesar de la gran cantidad de misiles lanzados, la mayoría fueron interceptados por el sofisticado sistema de defensa israelí, conocido como «Cúpula de Hierro«. Este sistema ha sido clave para mitigar el impacto del ataque, logrando interceptar la mayoría de los proyectiles antes de que alcanzaran sus objetivos.
El portavoz del ejército israelí, Daniel Hagar, anunció que las Fuerzas Aéreas continuarían bombardeando objetivos en distintas áreas del Medio Oriente, aunque no especificó si esto incluiría ataques directos a Irán.
Por su parte, el Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, calificó el ataque iraní como «totalmente inaceptable» y subrayó la necesidad de condena internacional. Esta acción es considerada el segundo ataque directo de Irán contra Israel en los últimos cinco meses.
Situación actual y próximos pasos
Israel se encuentra ahora en medio de luchas en siete frentes distintos, enfrentando la ofensiva de grupos en Gaza, Yemen, Siria e Irak, así como el reciente ataque iraní. Las autoridades israelíes han estado realizando una ofensiva militar limitada en el sur del Líbano contra Hezbolá, que ha sido debilitado significativamente por los recientes ataques.
El presidente de EE.UU., Joe Biden, y la vicepresidenta Kamala Harris, han estado monitoreando la situación desde la sala de situación de la Casa Blanca. A pesar de la gravedad del ataque, hasta ahora no se han reportado muertes en Israel. La respuesta del gobierno de EE.UU. será coordinada con Israel para abordar las acciones futuras y asegurar la estabilidad en la región.