La Batalla de Tarqui se libró el 27 de febrero de 1829 en el llamado Portete de Tarqui -a pocos kilómetros de la ciudad de Cuenca- entre tropas de la Gran Colombia, comandadas por Antonio José de Sucre y Juan José Flores, y tropas peruanas, comandadas por José de La Mar.
La mañana del día 27 de febrero, y después de una larga marcha que duró toda la noche anterior, el mariscal Antonio José de Sucre consiguió situar la Primera División colombiana de 1600 hombres, compuesta por tres batallones y un escuadrón, al norte de la llanura de Tarqui en posición ventajosa, mientras esperaba la llegada de la 2ª División. Mientras tanto, en cumplimiento de las órdenes de La Mar, la vanguardia peruana formada por la División del general José María Plaza, compuesta por 900 infantes, avanzaba sobre el portete.
La batalla dio inicio cuando una avanzada peruana de reconocimiento al mando del capitán Uria tropezó con una grancolombiana al mando del capitán Piedrahita trabándose un sangriento combate que comprometió al batallón Cedeño, comandado por el coronel José María Camacaro y al resto de la División peruana de Plaza. El batallón Rifles avanzó en apoyo del «Cedeño» y se encontraron con el batallón Quito. El desorden inicial de la batalla y la falta de visibilidad hizo que estos batallones se enfrentaran entre ellos.
El general Flores, mientras tanto, consiguió superar los bosques que le separaban del enemigo, y organizar un ataque conjunto de los diversos batallones. Viéndose superado en número y con las municiones agotadas, el general Plaza ordenó el repliegue en busca del grueso del ejército peruano encargando proteger la retirada al coronel Quiroz siendo en todo momento acosado por la infantería y caballería grancolombiana. Cuando a las 7 de la mañana el resto del ejército peruano, comandado por La Mar, arribó al campo ya la División de Plaza había sido batida y el ejército grancolombiano ocupaba su posición. El batallón Pichincha que protegía el flanco de La Mar fue obligado a retirarse no sin sufrir fuertes perdidas mientras que los dispersos de la división Plaza impidieron que el comandante Salaverry se posicionara en el desfiladero.
Viendo que el Portete de Tarqui ya había sido tomado por el ejército grancolombiano el general La Mar dispuso la retirada del ejército hacia Girón. Mientras tanto, la caballería grancolombiana bajo el mando del Coronel Daniel Florencio O’Leary intentaba cortar la retirada de la infantería peruana, en vista de ello el general argentino Mariano Necochea, al frente de los Húsares de Junín, comandó una carga de caballería que consiguió desbaratar a la caballería contraria y detener el avance de su infantería protegiendo de tal manera la retirada de la división peruana. Fue en este encuentro cuando se produjo el célebre duelo a lanza entre el coronel peruano Domingo Nieto, jefe del primer escuadrón de Húsares, y el valiente coronel José María Camacaro, que mandaba al célebre escuadrón Cedeño. Triunfó Nieto y Camacaro fue muerto.
El fracaso de esta última ofensiva y la retirada peruana selló el resultado de la batalla. El grueso del ejército grancolombiano consideró prudente conservar su posición mientras que el peruano logró replegarse en orden y formar sus divisiones en la llanura.
La victoria grancolombiana se debió en buena parte a lo estrecho del terreno, a lo ventajoso de la posición que ocupaba, lo precipitado del combate que impedía a las divisiones peruanas formar en orden de batalla y al enfrentamiento por separado contra la vanguardia del ejército peruano, que en ningún momento actuó de forma unitaria y dejó sus batallones aislados los unos de los otros. Las bajas fueron considerables, el ejército peruano perdió 1000 hombres entre muertos y heridos y 300 prisioneros mientras que el grancolombiano confesó 400 bajas en combate, a los que hay que agregar 600 reclutas desertores.
Consecuencias
* El resultado de la batalla obligó a La Mar a aceptar las condiciones de Sucre, establecidas en el Tratado de Girón.
* Las fuerzas peruanas se habrían de retirar de la provincia del Azuay y abandonar todas las plazas ocupadas. Si bien las fuerzas derrotadas se retiraron.
* La Mar se negó a entregar Guayaquil y, de hecho, se preparaba para iniciar una nueva ofensiva.
* Durante cinco meses la guerra se estabilizó pues la Marina de Guerra Peruana aún continuaba dueña del mar y el ejército grancolombiano no se hallaba en condiciones de intentar recuperar Guayaquil. Finalmente, el mismo Bolívar se había desplazado hacia el sur para dirigir la campaña para recuperar el puerto.
* La guerra acabó inesperadamente con un golpe de Estado por parte de Agustín Gamarra y otros jefes peruanos en Lima que derrocó a La Mar.
* El nuevo gobierno de Agustín Gamarra cesó las hostilidades y entregó Guayaquil el 20 de julio. El 22 de septiembre de 1829 se firmó un tratado de paz en Guayaquil y se preparó una comisión mixta para fijar definitivamente los límites entre ambos países.
* No obstante la disolución de la Gran Colombia pocos meses después dejó unas conclusiones poco claras, en gran parte gracias a un desacuerdo sobre la cédula real de 1802, que señalaba los obispados de Mainas y Quijos como parte del Virreinato de Lima, en lugar de la Real Audiencia de Quito, a quienes habían pertenecido hasta entonces. Este es el origen del largo conflicto fronterizo entre Ecuador y Perú.
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Excelente resumen de la Batalla de Tarqui, gracias por la informacion.
exelente, pero seria mucho mejor que fuera un poco mas corto
uuuuaaaooooo
ahhh… pero que tiene de nuestro, historico, heroico o "patriotico" una guerra llevada por publos hermanos y que justamente han servido para nuestra sumision; la del pueblo que se mata ente él mismo a favor de quienes nisiquiera conocemos y decimos que son "nuestros heroes".
ola es mucho pero si me sirve sacando un resumen que bueno que lo encontre
el resumen bien